Dani Molina atiende a Antena Huelva tras el partido (Foto: J.L.Tenor)
Buen Recre el que vimos ayer en el Colombino ante el Real Betis. Fue
una coincidencia unánime la que todos sacamos al término del partido. Eso sí,
queda lo principal: el killer del área.
De momento Rubén Mesa es el principal candidato si al final no viene Alex
Geijo. A Braulio le queda aún perder unos kilos para estar en estado óptimo.
Con esa carencia, al resto de las líneas las veo sólidas. El Recre tiene
una banda derecha con Víctor Díaz y Antonio Núñez
cuya disciplina es absoluta. Me tiene maravillado ese
perfil derecho en el que
el sentido táctico brilla a un alto nivel.
La parte izquierda es algo más anárquica dentro de un orden. Toño es
Primera División y sube con desparpajo una y otra vez; Cabrera nos enseñó ante
el Betis que ha venido para triunfar.
El centro de la zaga es el que me gusta en su certera aplicación del
término defensa. Los dos, Juanan y Menosses hacen el trabajo que se le exige a
una pareja de centrales. Habrá momento en los que se podrá jugar el balón y
otros en los que habrá que mandarlo fuera de las instalaciones. Ambos lo tienen
claro: el balón podrá rebasarle, pero nunca el rival.
Y en mediocampo, Jesús Vázquez se salió. No seré yo el que venga a
recordarles la profesionalidad de este jugador. Ustedes ya ven todo lo que da.
Y Dani Molina a sus dieciocho años, dio una lección de cómo hacer las
cosas. Demostró una madurez impropia de un chaval que acaba de llegar
al fútbol profesional. Le gusta al técnico, y ayer, al darle
90 minutos, dio una señal de que podría ser titular en liga.
En definitiva, un buen Recre que fue muy superior a un Betis con un gran
plantel. Ganó el cuadro verdiblanco por el invento de
Munuera sacando de su chistera una jugada convirtiendo una falta en
ataque, en un penalti.
Hay motivos para la ilusión. Ayer todo salió bien, pero fallaron los socios
que se quedaron en casa.
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