Pablo Comas habla con Sergi en un entrenamiento (Foto: J.L.Tenor)
No se habla de otra cosa en la ciudad que de la posición privilegiada del
Recre. La palabra ascenso está en la mente de todos los aficionados.
Sin embargo, en la plantilla sólo está presente el partido ante el Real Madrid-Castilla.
Es lo que debe ser. La duda está en conocer si el equipo será capaz de ser
fuerte mentalmente para aguantar mucho tiempo en esa zona de privilegio. El
Recreativo no tiene un equipazo ni un plantillón. A partir de ahí, si que hay
una plantilla decente con profundidad de banquillo. Hay unas 13 plantillas en
Segunda que han costado mucho más que la del Recreativo. De ahí que vayamos analizando
partido a partido para sacar conclusiones sobre lo que ha pasado y lo que podría
pasar. Los números están diciendo que este inicio de liga no lo conocíamos. Sergi
sabe que está ante la oportunidad de su vida para dar el salto a la élite. Un
ascenso es un aval que te lleva a cualquier parte elegida. El técnico ha demostrado
que sabe rectificar. Lo ha hecho y eso es plausible desde todas las vertientes.
Su bisoñez de la pasada temporada y las críticas que ejecutábamos tal vez hayan
servido para que hoy veamos a un equipo que puede dar la gran sopresa esta temporada.
El equipo sabe competir en Segunda.
Hablar de ascenso y lograrlo, lleva implícito muchos beneficios para todos.
Un beneficio para la entidad que podría ver su deuda liquidada con los catorce
millones que daría la televisión. Un beneficio para la ciudad que vería aumentada
su promoción turística. Un beneficio sentimental para un recreativismo que lleva
un lustro sin una sonrisa.
Todo ello no es una utopía. Y todo ello es posible si todos nosotros vamos
en la misma línea.
Este viernes acaba el plazo para sacar el carnet de socio acompañante. No
sería mala idea ampliar el plazo y esperar la victoria del Recre en Madrid. De
esa manera los 1.100 actuales podrían llegar la semana que viene a los 2.000.