Artículos de Paco Morán

miércoles, 13 de noviembre de 2013

Secuestrado

Pablo Comas y Pedro Rodríguez (Foto: J.L.Tenor)

Lugar en el que a Pablo Comas  le gustaría ver una plaza (Foto: J.L.Tenor)

Foto del Colombino secuestrado por los eucaliptos (Foto: J.L.Tenor)

Las mejoras hacia la modernidad y hacia la mejora de los servicios, están presentes en el Decano. No hace mucho, saltaba en la prensa la intención de los propietarios del Recre de hacerse con los terrenos del Tiro de Pichón para construir la ciudad deportiva al lado del Colombino. Esto presentado así es plausible. Más zonas deportivas en la Avenida Francisco Montenegro sería lo deseable para ir recuperando esa parte de la ciudad. Y sobre todo plausible la petición por parte de los que queremos ver crecer la ciudad hacia la estatua a Colón.
Pero entiendo no debe ser fácil esa concesión que actualmente, entre la Autoridad Portuaria y el Ayuntamiento deberían ponerse de acuerdo para ver la viabilidad de la intención del Real Club Recreativo de Huelva SAD. Una ciudad deportiva dentro de la ciudad seria lo deseable. El proyecto ya se ve bien en la imaginación de todos. La burocracia y la negociación a tres bandas deberían ponerse en marcha para saber si es posible llevar acabo la intención del club.
Esto parece que llevará algo de tiempo. Más fácil resultaría adecentar la fachada del Colombino. El estadio del Recreativo está secuestrado por los eucaliptos que quitan toda la vistosidad al coliseum del recreativismo.
Corta los eucaliptos de la frontal sería lo deseable. Hacer una plaza en esa zona daría mucho más valor a un estadio que en su exterior está abandonado. Lo que ocurre, que ha veces en España quitar un nido de golondrinas se considera mayor delito que matar a alguien. De ahí que lo de cortar los eucaliptos me da la sensación que debe ser una cuestión de Estado. Vamos, que sería más facial mover el estadio hacia otra zona que corta los árboles que secuestran el Colombino

De otro lado, la competencia del Ayuntamiento y de la Autoridad Portuaria, hacen que a día de hoy las quejas continúen sobre el abandono de los exteriores del Colombino. 

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