Imágenes que cambiaron el curso del partido (Foto: J.L.Tenor)
La
crisis sigue en su máxima profundidad. No hay manera de tapar el desangrado
albiazul. Ayer, tras la auto expulsión de Montoro, todo cambió. Atribuyo a él
la derrota por su ida de olla en un momento crucial del partido cuando el Recre
ganaba y dominaba.
Pero la
expulsión de Montoro fue sólo ayer. No así en los últimos tres meses que el Recre
lleva metido en esta crisis, con el islote beneplácito de la victoria en Soria.
No sé si del partido de ayer quedarme con algo positivo, dado que cuando pierdes
y ves como todo el capital logrado en la primera fase de la primera vuelta, se
ha ido por el sumidero. Si me piden algo, me quedo con que creo que ya todos hemos
visto que el mejor central que tiene el Recre, es Jesús Vázquez. No es nuevo
que yo diga que de los cinco centrales del Recre no sabría a quien poner y yo
lo echaría a suerte en cada jornada. Pienso que a Sergi le debe pasar lo mismo
cuando con los cinco centrales ha hecho cientos de combinaciones en la primera vuelta.
Aún no sabe que pareja es la más conveniente. ¿Y si es Jesús Vázquez y el
técnico no se ha dado cuenta?
Lo que
no necesita signo de interrogación es aseverar que la crisis de juego y
resultados está presente. Toca buscar soluciones y en ello está Sergi. Ayer reconocía
que había aspectos a mejorar con un tono cordial con la prensa y contestando
educadamente. Le han venido bien los consejos y la aplicación del sentido
común.
La primera
vuelta ha concluido a aun habiendo logrado seis puntos de los últimos treinta
posibles, el Recre sigue en puesto de liguilla. Eso sí, sin margen de error. Si
el sábado pierde podría caer a la decimo primera plaza. Cierto es que si gana podría
quedarse a dos puntos del líder. Las matemáticas dicen esto. Y también dicen
los números, que el Recre es el penúltimo en el juego limpio. Es decir, de los equipos
más tarjeteados de la categoría. Y la gran mayoría de estas tarjetas han sido
por llegar tarde balones divididos y al verse desbordado el jugador. Es otra de
las circunstancias a analizar.
Queda
ahora saber qué hacer para volver a ganar partidos en casa. El jugador veo que
se entrega y no pierde la cara al partido. No es cuestión de actitud. Ahora ya
no hay un equipo base. Tras tantas derrotas, Sergi empieza de cero para buscar
su once adecuado. Para el sábado, serán unos cuatro o cinco cambios respecto al
partido de ayer. Tiempo al tiempo.