El alcalde de Huelva, Gaby Cruz y el todavía presidente el Recre, Pablo Comas (Foto. J.L:Tenor)
Con la previsible venta del Recre al grupo hispano-mexicano,
se cerrará una etapa Comas-Víctor Hugo Mesa. Un período con muchas sombras en
los primeros tres años en los que el Recre dejó de ser propiedad municipal y pasó
a ser de unos dueños. Todos los análisis llegan desde la subjetividad, porque poca
información podemos aportar para decir con contundencia el qué ha pasado para
este caos. Tengo claro lo que tantas veces he manifestado. Comas quiso emular a
Dios obrando el milagro de los panes y los peces. Sin dinero es imposible reflotar
una empresa. Espero que los nuevos dueños vengan con la cartera llena, de no
ser así, fracasarán.
Desde el minuto uno mantuve que Comas se metía en un lío al comprar
una empresa en ruinas, pero mayor fue ese lío cuando descubrí que no tenía ni
para tomar café. Fue por lo tanto, Víctor Hugo el que fue poniendo dinero hasta
que se hartó de hacerlo y llegó el caos. Tanto Comas como Víctor Hugo, han demostrado
ser unos malísimos empresarios al equivocarse de negocio.
Podrán ustedes pensar que ambos han sacado pasta del Decano.
Yo sólo me atrevería a decir que Comas ha vivido muy bien en estos años, pero
dudo que se haya enriquecido. Es más, es indemostrable aportar información sobre
si ha ganado o ha perdido dinero con la inversión.
Pero esto ya es pasado si se confirma que los nuevos dueños cambiarán
todo como entiendo deben cambiar. Presidente nuevo, consejeros nuevos, director
deportivo nuevo, director de la ciudad deportiva nuevo. Creo que sólo deberían
quedar los empleados, si bien entiendo que en Segunda B los dueños no pueden
mantener una infraestructura como la actual.
Ya me empiezan a preguntar los oyentes que opino de los
nuevos dueños. No podría responder porque desconozco quiénes son y que intenciones
tienen. Lo que si puedo aseverar es que como le dije a Comas, se meten en un empresa
en ruina, en una ciudad sin grandes empresas y con una afición desanimada. Hoy
en día invertir en el fútbol no es negocio, sino un capricho. Los hay también quienes
opinan que si estos señores van a poner sobre la mesa unos cinco millones de euros,
algo buscarán. Podrán pensar lo que quieran porque el pensamiento está libre de impuestos.
Es gratis hacerlo. Yo pienso y analizo para decir que no sacarán ni un euro de beneficio
en esta inversión. Tiempo al tiempo. Invertir en el fútbol es ruinoso.
Y no quiero con esto ahuyentar a los inversores, sino todo lo
contrario, darle las gracias. Ellos tiene muchos más conocimientos que yo para
saber que lo que digo será verificable con el paso del tiempo.
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