Jaime Roures
Lo decíamos hace unas semanas, que el caos económico por el que atraviesa España podría afectar a la configuración de las plantillas. Un jugador en Segunda no podrá cobrar como la hacía hace unos años. O los jugadores ganan unas cantidades razonables o la cantera es la solución.
Porque Mediaproducción, la filial del grupo Imagina que gestiona los derechos del fútbol, entró ayer definitivamente en concurso de acreedores. El juzgado de lo Mercantil número 7 de Barcelona aceptó la solicitud de la empresa tras comprobar que existe un riesgo de insolvencia inminente, que ha atrapado a un total de 816 acreedores. Casi 900 proveedores están en riesgo de no cobrar. El grupo mediático que hasta ahora había sobrevivido por las subvenciones gubernamentales, se tambalea.
Y lo peor para Jaume Roures, socio principal o al menos cabeza visible de la compañía, es que su imperio podría inclinarse hacia el derrumbe. Aunque él niega los riesgos, de acuerdo con las últimas cuentas presentadas por la compañía en el Registro Mercantil, a 31 de diciembre de 2008, la deuda con empresas del grupo y asociadas se elevaba a casi 390 millones de euros.
Esto tiene muy mala pinta para los clubes. Y ante este panorama advertiría a los presidentes que antes de invertir en plantillas para ascender, que tengan en cuenta que tal vez no cobren lo pactado por derechos de televisión.
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