Llega un gran equipo

Poli y Sinama pugnan por un balón aéreo

La semana avanzó y con ella la vuelta a otra de las finales que el club decano debe afrontar para cimentar la permanencia. Lucas Alcaraz ya perfila en once que esperará a un Atlético de Madrid con savia nueva y con nuevo técnico, Abel Resinos. Un cambio de entrenador siempre supone un revulsivo que habitualmente obtiene sus frutos. Pero este Recre está en buen momento y es capaz de superar las pruebas más dificiles. Se quiera o no el Atlético es un grande del fútbol español que vendrá a Huelva a por todas. Quiere estar en Copa de Europa la próxima temporada porque su nuevo campo de fútbol necesita de esa competición. Por lo tanto, será otro de esos partidos para no perdérselo. Lucas Alcaraz ya podrá contar con todos sus efectivos una vez recuperados Javi Fuego e Iago Bouzón.
Volverán a ser titulares porque se han ganado esa confianza y lo han reafirmado con buenas actuaciones. Una semana en la que buen seguro el técnico ya habrá analizado a un equipo que es bueno de medio campo hacia arriba pero que tiene muchos problemas en medio campo y defensa. Presionar sobre la salida de balón será la consigna para poner en cortocircuito a los de Abel Resinos. Abre el Recre la tercera jornada de la segunda vuelta con una buena media de puntos y un entrecomillado problema para Lucas Alcaraz, dado que como mínimo cuatro jugadores se quedaran sin sitio en el banquillo. Los descartes para ese encuentro podrían dejar en la grada a hombres que perfectamente podrían ser titulares. Bendito problema que dirá Alcaraz. Poder elegir entre tantos futbolistas le da un plus de decisión más amplio. Y en nada de tiempo estarán también Jesús Vázquez y Beto. No olvidemos que Jesús es un jugador importante. No por estar las cosas saliendo tan bien como hasta ahora, nos tenemos que olvidar de un hombre que ha sido imprescindible en los tres últimos años. Es bueno contar con una plantilla amplia y con hombres disponibles para facilitar el trabajo del técnico y aumentar la competitividad.
Hay un deseo común de enfrentarse a uno de los equipos grandes de la liga. Hay codazos por hacerse un hueco en el once y si bien no todos tienen un sitio, si todos los jugadores tienen hambre por jugar. Eso repercute en los beneficios que el equipo puede lograr antes del llegar al segundo Tourmalet de la liga. El objetivo es lograr un colchón de diez puntos respecto al tercer clasificado por la cola.
Con una plantilla amplia y un entrenador con las ideas claras es posible.